dissabte, 29 de maig del 2010


"..so swoon baby, starry nights ...."
Ƹ̵̡Ӝ̵̨̄Ʒ

La historia de los Sentimientos ...

Se cuenta que una vez se reunieron en un lugar de la tierra todos los sentimientos y cualidades de los hombres. Cuándo el aburrimiento hablaba bostezando porque no hallaba qué hacer... la locura les propuso, vamos a jugar a las escondidas!!! La intriga levantó la ceja y la curiosidad sin poder contenerse preguntó ¿a las escondidas, y cómo es eso?? Es un juego, dijo la locura, en el cual yo me tapo la cara y empiezo a contar desde el uno hasta un millón, ustedes se esconden y cuando yo termine, al primero que encuentre ocupara mi lugar, para continuar el juego.

El entusiasmo bailó secundado por la euforia, la alegría dio tantos saltos que terminó por convencer a la duda, he incluso a la apatía, a la que nunca le interesaba nada.Pero no todos quisieron participar. La verdad prefirió no esconderse, para qué si al final siempre le llevan. Y la soberbia opinó que era un juego muy tonto, en el fondo lo que le molestaba era que la idea no hubiese sido de ella, y la cobardía prefirió no arriesgar.

Uno, dos, tres,... comenzó a contar la locura.

El primero en esconderse fue el enojo que como siempre se dejo caer en la primera piedra del camino. La fe subió al cielo, y la envidia se escondió tras la sombra del triunfo, que con su propio esfuerzo había logrado subir a la copa del árbol más alto. La generosidad casi no alcanzaba a esconderse, cada sitio que encontraba le parecía maravilloso para algunos de sus amigos. Un lago cristalino fue ideal para la belleza. Un huequito de un árbol fue perfecto para la timidez, un vuelo a la mariposa lo mejor para la voluptuosidad, una ráfaga de viento magnífica para la libertad. El egoísmo, en cambio, encontró un sitio muy bueno desde el principio, ventilado y cómodo pero sólo para él.La mentira se escondió en los fondos de los océanos, y el olvido, se me olvidó dónde se escondió. Cuando la locura contaba novecientos noventa y nueve... el amor aún no había encontrado un sitio para esconderse, pues todo se encontraba ocupado, hasta que vio un hermoso rosedal y decidió esconderse entre sus flores... mil contó la locura y comenzó a buscar...

El primero en aparecer fue el enojo a solo tres pasos de la piedra, después se escuchó la fe discutiendo con Dios en el cielo sobre teología, y la pasión y el deseo lo sintieron vibrar desde los volcanes. En un descuido encontró a la envidia y claro así pudo decir dónde estaba el triunfo. El egoísmo no tuvo ni que buscarlo, él solito salió disparado de su escondite que resultó ser un nido de avispas. De tanto caminar la locura sintió sed, y al acercarse a un lago descubrió a la belleza, y con la duda resultó más fácil, pues la encontró sentada sobre una cerca sin decidir aún dónde esconderse. A la angustia la encontró en una obscura cueva y a la mentira en el fondo del océano, y hasta el olvido, que ya se le había olvidado dónde esconderse, lo encontró...

Pero sólo el amor no aparecía por ningún sitio.

La locura buscó detrás de cada árbol, en cada lugar del planeta; en las cimas de las montañas, en todos lados buscó, y cuando estaba por darse por vencida, vio un rosedal y comenzó a mover sus ramas, las espinas habían herido los ojos al amor, la locura no sabía qué hacer para disculparse... lloró. Rogó, imploró perdón y hasta prometió ser su lazarillo...Y desde entonces, desde que por primera vez se jugó a las escondidas en la tierra, EL AMOR ES CIEGO Y LA LOCURA SIEMPRE LO ACOMPAÑA.

Por: Guadalupe Gutiérrez.